Mayo 23_13
Si estáis Conmigo, os iré protegiendo, aún a pesar de que caminéis por
caminos obscuros.
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Rosario
vespertino
Temas:
Mensaje de
Dios Padre y Nuestro Señor Jesucristo a J. V.
Primer
Misterio, Habla Dios Padre.
Sobre: Es más sabio callar que hablar mal de vuestros hermanos y Yo os premiaré esta acción de callar porque, sabiamente, sabéis que no sois capaces de juzgar al prójimo. Hijitos Míos, la medida con la que vosotros juzgáis es muy diferente a la Mía y, es más, vosotros ni siquiera debierais juzgar, porque no estáis capacitados para hacerlo, porque no sois perfectos, no sois santos, no sois sabios, como Yo lo Soy, vuestro Dios.
Mis
pequeños, Mi medida, que es Perfecta, es también Misericordiosa. Yo Juzgo
como Padre, Juzgo como Dios, pero Juzgo siempre en el Amor, en Mi Amor
Perfecto. Al juzgar así, Mis pequeños, realmente estoy juzgando Sabiamente,
correctamente y con esto, al hacerlo en forma neutral, Yo realmente veo la
magnitud de vuestros pecados, pero también la magnitud de vuestras buenas
obras. Yo sí puedo poner en la balanza lo bueno y lo malo de cada uno de
vosotros, porque Yo os conozco perfectamente.
Vosotros,
cuando juzgáis, juzgáis en una forma incorrecta, a la mejor estáis viendo por
vuestras necesidades o por vuestra forma de pensar incorrecta, y así,
vuestros juicios no van a ser imparciales, no van a ser correctos, juzgáis
mal y lo peor de todo, es que ponéis ante vuestros hermanos a una persona
juzgada incorrectamente, a quien la van a tratar injustamente y todo por
vuestra culpa y todo porque vosotros no estáis capacitados para juzgar como
Yo os juzgo.
Mis
pequeños, el Juicio de cada uno de vosotros, que será al final de
vuestra existencia, será para que vosotros obtengáis vuestro regalo o vuestro
castigo pero, esto será en forma imparcial. Yo no estoy buscando el
condenaros porque alguna vez Me tratasteis mal y Me quedé adolorido por mucho
tiempo y que puedo aprovechar esta oportunidad de Juicio parcial de vosotros
para condenaros y así desquitarMe de lo que Me hicisteis. No, Mis pequeños,
Yo os voy a juzgar correctamente y os voy a dar vuestro premio o vuestro
castigo correctamente, vosotros no debéis tomar un papel que no os
corresponde porque estáis tomando un papel Divino y no estáis capacitados
para ello, porque no conocéis el corazón de vuestros hermanos.
En las Escrituras
se os dice que “calléis antes de juzgar” y ésa será una forma sabia de
actuar, porque si vosotros juzgáis y al juzgar mal, como os he dicho,
vuestros hermanos van a tratar mal al que fue juzgado incorrectamente, vosotros
seréis culpables de las acciones que él pueda cometer, porque fue mal juzgado
por vosotros.
Algún
hermano vuestro, igual se puede desquitar por vuestro juicio equivocado o al
ver que todos le rechazan, quizá hasta pudiera tomar una acción contra sí
mismo o hasta quitarse la vida, porque se va a sentir señalado por todos los
que le rodean y esto, porque fue un juicio incorrecto.
¡Cuántos
errores no se han cometido en el pasado!, y vosotros sabéis de muchos de
ellos, que el hombre juzgó incorrectamente a otros y se cometieron muchas atrocidades.
Os repito, es más sabio callar que hablar mal de vuestros hermanos
y Yo os premiaré esta acción de callar porque, sabiamente, sabéis que no sois
capaces de juzgar al prójimo porque no conocéis perfectamente su corazón como
Yo lo conozco.
Gracias, Mis pequeños.
Segundo
Misterio, Habla Dios Padre.
Sobre: Si vosotros escogéis el Bien, debéis ser ejemplo de ése Bien, ya no podéis, en ninguna forma, dar un mal ejemplo, ni con palabras, ni con obras, ni con deseos vanos. Hijitos Míos, San Juan, Mi discípulo amado, os dice en las Escrituras, que si se pudieran escribir todas las cosas que Yo les dije en aquél tiempo, no alcanzarían los libros y llenarían toda la Tierra. Pero Yo os digo, Mis pequeños, que todas Mis Enseñanzas, se resumen en una sola cosa, en actuar en el Amor.
Mis
pequeños, hay dos cosas solamente en vuestra actuación y vosotros escogéis:
el Bien o el mal.
Si
vosotros escogéis el Bien y queréis vivir en el Bien, inmediatamente y
absolutamente, deberéis rechazar todo el mal que llegue a vosotros y, además,
de aquél que nazca en vuestro corazón.
Ciertamente,
al estar en el mundo, estáis rodeados también del ataque de satanás. Hay
maldad a vuestro alrededor, hay maldad que os ataca, hay maldad que quiere
destrozar vuestra alma para que no tenga el premio eterno en el Reino de los
Cielos. Vosotros, al tener el libre albedrío, podéis escoger entre Mi Bien o
el mal que él también ha diseminado.
Si
vosotros escogéis el Bien, debéis ser ejemplo de ése Bien, ya no podéis, en
ninguna forma, dar un mal ejemplo, ni con palabras, ni con obras, ni con
deseos vanos. Vuestro pensamiento, vuestro actuar tienen que estar
alineados hacia el Amor. Cuando vosotros os llenáis realmente de Mi Amor,
todo debe ser santidad en vuestra vida.
Ser santos
es reproducir Mi Imagen sobre la Tierra.
Ser santos
es tocar corazones para su conversión.
Ser santos
es ayudar a aquellos que han escogido el camino del mal y vosotros, les abrís
los ojos para que se den cuenta que su caminar, su actuar, su vivir, no es el
correcto.
Ser
santos, es saber sufrir y morir por Mi Ideal Divino, que es el de
transmitirle a todos vosotros Mis Enseñanzas y Mi Amor.
Ser santos
es ser valientes ante los ataques de personas, hermanos vuestros, que humanamente
puedan tener una posición más alta que vosotros, ya sea económica, social y
aún espiritual. Esta
valentía solamente se obtiene viviendo en la Verdad y en el Amor. Ser
santos es mostrarles a vuestros hermanos de este tiempo, que Yo sigo trabajando
en las almas y que Yo sigo Viviendo y Existiendo en las almas, que no Soy un
Dios del pasado, que no Soy un Dios Bíblico, que quedó plasmado
solamente en un libro y que ése libro fácilmente se puede guardar en una
gaveta y olvidarlo ahí. No, Mis pequeños, Yo Soy un Dios que vive, respira,
actúa, que está entre vosotros, que está en vuestra vida, que está en vuestro
interior.
Ser santos
es vivir en la Justicia, es vivir en la Verdad, es vivir como verdaderos
hermanos,
preparando a todos los hombres de la Tierra, para entrar en contacto con
vuestros hermanos de los Cielos y, así, que la Tierra y el Cielo se unan,
para que sean ya una sola familia.
Os pido,
Mis pequeños, seáis ésas almas valientes, ésas almas decididas, ésas almas
llenas de Mi Amor, para que podáis mover corazones, como Yo los he movido y
empezando por los vuestros, porque si vosotros Me estáis escuchando, es
porque Mis Palabras, Mis Obras y Mi Amor os movieron y Me seguís porque Me
amáis y porque queréis llegar a la perfección a la que habéis sido llamados.
Gracias, Mis pequeños.
Tercer
Misterio, Habla
Dios Padre.
Sobre: No os quisisteis dar por vuestros hijos, no les quisisteis dar la Verdad, que como vosotros, padres, os obligaba a enseñarla a vuestros hijos. ¡Ay de vosotros, generaciones futuras, cómo sufriréis por vuestro error! Sufriréis lo que vosotros no inculcasteis en vuestros hijos. Sufriréis porque no les enseñasteis a amar y a respetar. Sufriréis porque no les enseñasteis que existe un Dios, que es Todo Bondad, que es Todo Donación, que es Todo Vida y le dejasteis a vuestros hijos escoger su tipo de vida de acuerdo a su poca experiencia y las experiencias de su alrededor, que las más de las veces, son erróneas, equivocadas y aún podría decir, malvadas.
Sufriréis
vuestro error, porque eso que les dejasteis aprender sin ninguna guía
espiritual, se volverá contra vosotros y contra los vuestros.
Cuando
alguien no crece bajo leyes determinadas, toma caminos equivocados, quizá en
algún momento de su vida, podrá tener acceso a la Verdad y oportunidad de
cambiar, pero, si su error persiste, mucho error transmitirán y ése error, lo
padeceréis y lo padecerán vuestros hermanos.
Por eso
hay tanto error en el mundo, porque los padres ya no han enseñado a los
hijos, primeramente, a respetarMe a Mí, vuestro Dios. No les enseñaron a
respetar y a dejarse guiar por Mis Leyes y consejos que tenéis en las
Escrituras. No les enseñasteis a que hay un futuro y que ése futuro será
eterno y que hay que luchar por él, porque si no es así, padeceréis un futuro
de dolor.
¡Tanto que
dejasteis de hacer por vuestros hijos y, por eso, por los errores que ahora
viven, lo sufriréis en carne propia! No enseñasteis el amor y, el odio
humano, el odio satánico, la maldad que se encierra en los corazones no bien
guiados, se volverá contra vosotros, primeramente contra aquellos que fueron
los progenitores y que no enseñaron el bien vivir a sus hijos.
Eso es una
Ley Divina, Mis pequeños, que todo lo que vosotros hagáis o dejéis de hacer,
tarde o temprano se volverá contra vosotros y contra los vuestros. Así que no os quejéis y Me
echéis la culpa de lo que os suceda, Mis pequeños, porque esto será
causado por vuestro error, porque no os quisisteis dar por vuestros hijos, no
les quisisteis dar la Verdad, que como vosotros, padres, os obligaba a
enseñarla a vuestros hijos.
Yo os he
dado el don de la vida y el don de la vida no es un juego, es una grave
responsabilidad. Cuando vosotros Me pedisteis tener hijos, al darles el don
de la vida, vosotros adquiristeis una responsabilidad muy grave ante Mi
Presencia y en una multitud de casos, veo almas vacías, infinidad de
almas que no llevaron a cabo su misión, primeramente con sus hijos y luego
con vuestros hermanos, o sea, vuestro prójimo.
Todo eso
que dejasteis de hacer, se volverá contra vosotros.
Ahora veis
cómo actúan los jefes de estado, cómo actúan hermanos vuestros que tienen el
poder en sus manos, ¿acaso sus acciones son correctas, son sabias, son
justas? No, Mis pequeños, la gran mayoría de sus acciones no son las que
saldrían de Mí, vuestro Dios y os lo digo así, Mis pequeños, porque Yo Soy el
Perfecto y vosotros teníais la obligación de transmitirle a vuestros hijos,
las obras, las Enseñanzas de Quien Es el Perfecto y ése Soy Yo. Al no tener
Mis Enseñanzas, se mueven como animalitos y de acuerdo a su propio albedrío,
que no es el correcto y, así, vosotros vais padeciendo vuestro error y vais
sufriendo vuestra necedad, porque no os disteis a vuestros hijos, no os
disteis a vuestros hermanos, no disteis el ejemplo correcto, para que se
viviera en la Tierra, como se vive en el Cielo.
Así que no
os quejéis, Mis pequeños, no os quejéis, porque vosotros
fuisteis los autores del dolor que ahora padecéis. No enseñasteis a
amar a los vuestros y, ahora, estáis padeciendo lo que ellos aprendieron del
mundo y el mundo, es satanás. Dolor hay en todos lados, hay
muerte, hay destrucción, y eso no viene de Mí, viene de satanás y eso
lo aprendieron vuestros hijos porque no les enseñasteis primeramente a amar y
a respetar a vuestros hermanos.
Orad, orad
mucho, pero sobre todo, dad buen ejemplo, dad el ejemplo de tenerMe a Mí en
vuestro corazón y así podréis todavía arreglar un poco de vuestro error,
haciéndole ver a vuestros hermanos de vuestro cambio y cambio radical. El
Amor Soy Yo, y Mi Amor debe estar en vosotros.
Gracias, Mis pequeños.
Cuarto
Misterio, Habla Nuestro Señor Jesucristo.
Sobre: Meditad todo esto, Mis pequeños, para que Me deis vuestro amor, el amor que no Me quisieron dar muchos de vuestros hermanos de ayer ni muchos de vuestros hermanos de hoy. Hijitos Míos, la gran mayoría de vosotros, solamente veis Mi Cruz con la que fui al Calvario. Una Cruz de madera, pesada, una Cruz, que luego Me sostuvo y Me mostraba ante los hombres como alguien deplorable, malvado, despreciable. Esa Cruz fue la culminación de Mi Vida como Redentor, como Maestro del Amor pero, ciertamente, ésa no fue solamente Mi Cruz, Yo tuve también Mi Cruz en la vida, como Hombre.
Ciertamente
Dios, pero, también, ciertamente, hombre y lo quise hacer así, Mis pequeños,
respetando el deseo de Mi Padre, de tomar un cuerpo humano, para también
sentir lo que vosotros sentís, desde lo más sencillo y natural, como son los
cambios de temperatura, hasta el rechazo del prójimo, que es muy doloroso,
Mis pequeños, especialmente cuando viene de un ser querido, como fueron Mis
apóstoles.
Ciertamente
llevé una Cruz pesada en Mi Vida pública, fui rechazado, atacado, depreciado
y Yo lo único que quería era el bien de todos vosotros.
Si
vosotros estuvierais en Mi lugar, comprenderíais mejor la situación que Yo
padecí. Poneos por un momento en Mi lugar, Soy un Dios de Amor, vengo
en paz, vivo en la Paz total, traigo un regalo inmenso para todos los hombres
que son las Leyes y Enseñanzas Divinas que, al actuar, al vivir en ellas,
solamente os van a producir bienestar, una paz que de ninguna otra forma
podréis sentir vivir.
Yo quería
lo mejor para las almas de ése momento y para todas las futuras, también,
pensando en vosotros, ¿acaso es malo transmitir un bien? Y aún por ello Me
estaban atacando.
Os vuelvo
a repetir, poneos en Mi lugar, ahora vosotros, sois Yo, vuestro Jesús,
vosotros estáis caminando entre los hombres, les estáis llevando amor, paz,
una forma de vivir correcta y esto, automáticamente os lleva a altos grados
de perfección en lo que estéis haciendo, porque cuando se vive en el Bien,
cuando se vive correctamente, cuando se vive en la Verdad, todos os ayudáis y
de esta forma, todos crecéis y lo que estéis haciendo va a dar mucho mejor
fruto.
Seguís
estando en Mi lugar, estáis llevando amor a vuestros hermanos y de repente os
empiezan a atacar, os empiezan a maldecir y vosotros, os quedáis
estupefactos, ¿por qué me están atacando?, si yo solamente les estoy dando un
bien, les estoy enseñando a vivir lo correcto, que les va a dar un bien
supremo.
Seguís
enseñando, seguís dando el buen ejemplo y os siguen atacando, os apedrean, os
blasfeman y, un tiempo después, hasta piden vuestra muerte y todo por hacer
el bien.
¿Se os
hace esto correcto, Mis pequeños? ¿Se os hace justo? Si vosotros mismos que
estáis tomando Mi lugar no entendéis el actuar de vuestros hermanos, que cómo
es posible que os hayan atacado y hasta hayan pedido vuestra muerte, porque
los amáis, porque queréis lo mejor para ellos y no lo entendéis. ¿Os dais
cuenta de cómo el corazón del hombre es tan diverso y hay maldad en él?
Ciertamente, ésta maldad, viene de satanás y como estáis en sus dominios, él
no quiere saber de Mí, de vuestro Dios. Él no quiere saber del Amor y, por
eso, a Mí, el Hijo de Dios, fui Sacrificado por los mismos hombres a quienes
Enseñé a amar y despreciaron el Amor y siguieron buscando el odio y la
maldad, porque no quisieron llenar su corazón de Amor.
¿Se os
hace todo esto justo, Mis pequeños? Si para vosotros mismos esto os duele, y
no lo comprendéis, imaginad lo que Me hicieron a Mí, el Hijo de Dios, el Dios
hecho Carne. Yo, Todo Bondad, Todo Amor, que además les dio ejemplo de
Divinidad al curar a muchos de vuestros hermanos y, aún así, pidieron Mi
Muerte. ¿Se os hace esto justo, Mis pequeños?
Meditad
todo esto, meditad, Mis pequeños, para que sintáis en vosotros Mi Dolor, para
que sintáis la injusticia, para que comprendáis Mi Vida sobre la Tierra. Meditad todo esto, Mis pequeños,
para que Me deis vuestro amor, el amor que no Me quisieron dar muchos de
vuestros hermanos de ayer ni muchos de vuestros hermanos de hoy.
Gracias, Mis pequeños.
Quinto
Misterio, Habla
Dios Padre.
Sobre: Todo aquél que viva para Mí, será protegido de los ataques de satanás, Yo arreglaré sus problemas, vosotros, enmendaréis vuestro camino, al ver cómo os voy protegiendo Hijitos Míos, agradeced en todo momento lo que venga a vuestra vida. Vosotros no entendéis muchas cosas que pasan a vuestro alrededor, pero todo está dentro de un Plan Divino, que es Perfecto.
Sabiduría
debéis pedir, Mis pequeños, para empezar a entender, ligeramente, Mis
Designios Divinos. Mientras más humildes seáis y aceptéis Mi Voluntad, más
sabios seréis y vuestras capacidades espirituales, crecerán, porque el que es
sabio, sabe hacerse pequeño y sabe escuchar a su Dios, sabe dejarLe vivir
plenamente en su ser.
Sabéis,
porque os lo he dicho, que nada sucede por casualidad, que todo tiene
una razón de ser, aún a pesar de que vosotros lo veáis en el mal, Yo siempre
buscaré vuestra salvación eterna, Yo siempre buscaré por la salvación de
vuestra alma.
Estáis en
la Tierra para servirMe. Sabéis, que estando en la Tierra, ataques
vendrán por todos lados, pero, también, Mi Gracia os estará cubriendo.
Si estáis Conmigo, os iré protegiendo, aún a pesar de que caminéis por
caminos obscuros y llenos de maldad. Esto está escrito en las
Sagradas Escrituras, es Mi Promesa, porque Soy vuestro Dios.
Todo aquél
que viva para Mí, será protegido de los ataques de satanás, Yo arreglaré sus
problemas, vosotros, enmendaréis vuestro camino, al ver cómo os voy
protegiendo de situaciones difíciles y a veces, imposibles ante vuestros
ojos.
Confiad en
Mí, Mis pequeños, os lo he dicho muchas veces, pero dudáis, dudáis mucho, no
tenéis confianza plena en Mis Palabras.
La vida en
la Tierra es solamente un momento de vuestra existencia, no es vuestro hogar, vinisteis a dejar algo de
vosotros y no necesariamente de vosotros, sino de Mí, vuestro Dios, pero
salido de por vosotros.
Debéis
dejar Vida, porque Vida es lo que Yo os di. Os habéis llenado de Mi Vida y
vosotros, daréis lo que tenéis en vuestro ser. En las Escrituras leéis que la
boca habla de lo que tiene el corazón y puedo añadir que, vosotros, actuáis
porque tenéis al Actor de vuestra vida en vuestro interior, que Soy Yo.
Yo debo
actuar plenamente a través de vosotros y, por eso, a lo largo de vuestra
existencia, podéis ver a hermanos vuestros actuando en el bien y otros
actuando en el mal y todo esto se da de acuerdo a que si habéis abierto
vuestro corazón al Bien, a la Verdad, al Amor o si lo habéis abierto al mal,
a la destrucción, a la muerte, que es de satanás. Y, así, vais viendo a lo
largo de vuestra existencia cómo las almas van escogiendo unas, acertadamente
y otras erróneamente y con ello ya os podréis imaginar su futuro eterno.
¿Qué
camino tomaréis vosotros? Esa es la pregunta que os debéis hacer
primeramente, ¿A quién estoy sirviendo? ¿Qué debo transmitir? ¿Qué voy a
dejar en mis hermanos? Y recordad que vuestras acciones son parte de una
cadena. Si en la cadena en la que estáis y siendo vosotros los eslabones,
venía dándose el mal y de repente con vuestra presencia, se da el bien, los
siguientes eslabones seguirán en el bien, porque vosotros cambiaréis la
acción del futuro de muchos, por vuestro actuar, por vuestras creencias,
porque defenderéis a vuestro Dios en el mundo y vuestro premio se dará en
magnitud grande si vuestros actos y vuestro ejemplo movieron almas en lo
futuro. Pero si vuestro actuar fue malo, destructivo y muchas almas se
perdieron por vuestro ejemplo, por vuestra maldad, también se os juzgará por
ello y la muerte de ellos, será por vuestra culpa y, de esta forma, por haber
actuado en el mal y haber dado mal ejemplo, que destruyó muchas almas, sabéis
perfectamente a dónde iréis eternamente.
Os repito,
sólo existe el Bien y el mal ¿A dónde iréis vosotros? ¿Qué daréis a vuestros
hermanos? ¿Cómo llegaréis ante Mí? ¿Con la frente en alto, con un corazón
inmenso o tratándoos de esconder, evitando Mi Mirada, que os quemará, que os
acusará y que ya sabréis vuestro destino eterno?
Meditad
este momento que tarde o temprano vendrá para cada uno de vosotros, ¿cómo
estaréis ante Mí? Nadie se salvará de ése momento, creáis o no creáis en él,
creáis o no creáis en Mí, tarde o temprano estaréis ante Mi Presencia.
Gracias, Mis pequeños. |
Mayo 15_13
Éstas son las señales que...está preparando satanás para bajar nuevamente y
convivir.
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Rosario
vespertino
Temas:
Mensaje de
Dios Padre y la Santísima Virgen María a J. V.
Primer
Misterio, Habla Dios Padre
Sobre: Perder Mi Gracia, Mis pequeños, es lo más grave que puede tener un alma, porque Yo os estoy dando la Vida, Yo os estoy cuidando, Yo Soy vuestro Padre Providente y Amoroso. Hijitos Míos, todos vosotros buscáis la libertad. Muchos de vosotros no queréis tener compromisos de ninguna especie y por eso buscáis vuestra libertad, pero se vuelve un libertinaje terrible vuestra vida.
La
libertad real la tenéis estando Conmigo, Mis pequeños, cuando vosotros
cumplís los Mandamientos, cuando vosotros vivís en el amor y en el respeto
hacia vuestros hermanos. Cuando vosotros vivís sirviendo a vuestros hermanos,
con todos los dones y capacidades que Yo os he dado y lo hacéis con amor, en
ése momento, vosotros estáis viviendo en libertad, porque el amor, Mi Amor
Verdadero, que es el Único Amor Verdadero, es el que os da ésa libertad,
porque en el Amor vosotros dais, no os estáis preocupando si os van a dar,
que realmente, sí os dan, porque al momento en que a vosotros, con un gesto
de alegría, de amor, os agradecen vuestras acciones, en ése momento vosotros
quedáis satisfechos de lo que hicisteis por vuestros hermanos y no pedís más,
porque el amor lo llena todo.
Pero
cuando vosotros vivís en contra de Mis Leyes, queriendo vivir una vida sin
obligaciones, es cuando vosotros estáis viviendo una vida de pecado, estáis
viviendo solamente para vosotros mismos, vivís una vida egoísta y mala, no
estáis sirviendo a vuestros hermanos, es más, los estáis atacando, los estáis
destruyendo, no os importan sus sentimientos, simplemente vosotros estáis
gozando o creéis estar gozando con lo que estáis haciendo y haciendo daño a
vuestros hermanos. No, Mis pequeños, eso no es libertad, os repito, es un
libertinaje pecaminoso que no os va a llevar a ningún lado bueno, es más,
vosotros mismos estáis preparando el camino para vuestra condenación eterna.
Debéis
aceptar Mis Leyes, Mi Amor y cuando vosotros lo hacéis así, realmente, a
pesar de que Mis Leyes, Mis Mandamientos os están limitando en cierta forma,
os mantienen en santidad, pero ¿qué es lo que os limitan Mis Leyes?, vuestra
carnalidad, vuestro pecado, vuestra maldad. Yo os conozco, conozco al género
humano, conozco cómo pecáis y cuales son vuestras inclinaciones materiales,
carnales y, por eso, Yo os voy recordando en Mis Leyes en qué vosotros debéis
estar atentos para no caer y perder Mi Gracia, que eso es mucho más
importante, Mis pequeños, que estar buscando vuestra libertad.
Perder Mi
Gracia, Mis pequeños, es lo más grave que puede tener un alma, porque Yo os estoy dando la
Vida, Yo os estoy cuidando, Yo Soy vuestro Padre Providente y Amoroso. Si
vosotros no os acercáis a Mí y, además, os la pasáis atacándoMe, Mis
Bendiciones no llegan a vosotros y vosotros quedáis a merced de satanás.
Entonces,
¿en dónde queda vuestra libertad, Mis pequeños? Al contrario, vosotros mismos
os encadenáis al mismo satanás, porque estáis viviendo de acuerdo a lo que él
os pide, que es vivir en pecado, que es vivir en contra Mía, que no es seguir
Mis Mandamientos, Mis Leyes, Mi Voluntad.
¿Entendéis
esto, Mis pequeños? ¿Veis cómo vuestro pensar es incorrecto? Perdéis
realmente vuestra libertad al estar en contra Mía, porque os estáis
encadenando vosotros mismos al pecado y a la maldad de satanás.
Meditadlo,
Mis pequeños, porque vosotros mismos estáis llevando vuestra alma a la
perdición eterna.
Gracias, Mis pequeños
Segundo
Misterio, Habla Dios Padre.
Sobre: Cuando llegáis a ésos niveles, en los que ya Me tenéis una plena confianza, en aquellos momentos en que apenas Me invocáis, Yo ya estoy ahí y ya sabéis que estoy con vosotros y en vosotros inmediatamente. Hijitos Míos, desde que sois pequeños, y necesitáis algo, vais con vuestros padres y les pedís, como podáis, si es que no habéis aprendido a hablar, hasta con señas lo que necesitáis, vais creciendo y seguís pidiendo por vuestras necesidades. Muchas veces, no se os quiere hacer caso, ya sea por tiempo o porque no son los momentos, pero vosotros seguís insistiendo, hasta que obtenéis lo que queréis. Vuestros padres deciden, si lo que vosotros estáis pidiendo, sea bueno o no, para concedéroslo o no. Esto en cierta forma, Mis pequeños, es oración, por eso quiero que vosotros lo llevéis hacia lo espiritual. Si vosotros os acercáis a Mí para pedirMe, vosotros debéis insistir. Mi Santo Espíritu, dentro de vosotros, os indica si será bueno o no. Vosotros mismos sabéis si será bueno para vosotros o nada más lo queréis para llenar un gusto, pero que no os va a llevar a nada bueno, pero si insistís, porque os va a dar un gusto personal Yo decidiré si os lo concedo o no.
A lo que
voy con todo esto, Mis pequeños, es sobre la oración, que tantas veces os lo
he pedido. Estos son tiempos en que la oración, o sea, el acercamiento
de las almas hacia Mí, debe ser total y quisiera que fuera así,
Mis pequeños, no solamente en pequeños momentos del día, sino
que vosotros hicierais el esfuerzo de manteneros en ése coloquio Divino,
Conmigo, con vuestro Dios. Sería el regalo más grande que Me
pudierais dar, Mis pequeños, porque en ése coloquio, vosotros aprendéis
muchas cosas que no conocéis.
Yo voy
instruyendo a las almas, cuando veo que se acercan con un interés muy
especial, que es el de crecer espiritualmente. Cuando el alma insiste, Yo no
la desoigo. Ciertamente, a veces, como que Me escondo, o como que hago que
no escucho, para que el alma insista y eso le dé fuerza a su oración.
Cuando el
alma va creciendo, y va teniéndoMe más confianza, va aumentando sus tiempos
de estar Conmigo. Ya no Me escondo, al contrario, respondo, el alma
se alegra, se vuelve un coloquio muy bello, el alma sabe que está con su Dios
y que le está respondiendo, que está con Él y es cuando el alma empieza a
sentir y vivir situaciones nunca antes vividas y goza el alma y ya no se
quiere separar de Mí.
Es la
mejor forma en que enamoro a las almas, las voy preparando poco a poco, no
insisto ni obligo, poco a poco voy dejando que las almas Me encuentren, Me
gocen y después, ya no pueden vivir sin Mí.
El alma Me
necesita, Soy el Alimento Supremo del alma, el alma necesita crecer, el alma
necesita alimentarse, el alma necesita santificarse y no lo va a lograr
si no es a través Mío, viviendo plenamente en Mí.
Mis
pequeños, cuando llegáis a ésos niveles, en los que ya Me tenéis una plena
confianza, en aquellos momentos en que apenas Me invocáis, Yo ya estoy ahí y
ya sabéis que estoy con vosotros y en vosotros inmediatamente. Al tenerMe ya
esa confianza, Mis pequeños, es cuando vuestra oración se vuelve
poderosísima, estáis contando Conmigo para todas vuestras acciones, para las
necesidades de vuestros hermanos, os volvéis intercesores y eso es lo que
quiero que seáis todos vosotros, pero para ser verdaderos intercesores,
debéis haberMe encontrado a Mí, vuestro Dios y, sobre todo, sabéis
que Me estáis viviendo dentro de vosotros mismos, sois Mis Cristos, sois Mi
Vida, Somos uno y, vosotros, en ése momento, os dais cuenta,
plenamente, quiénes son los que más Me necesitan. Es Mi Amor,
en vosotros, el que os hace pedirMe a Mí, vuestro Dios, por sus necesidades.
Os volvéis receptores de todo lo malo que sucede a vuestro alrededor, en ése
momento vosotros deseáis que todo mejore, ya sea una persona, un país, el
mundo entero, el Universo entero. Cuando estáis Conmigo os volvéis más
sensibles, tanto para lo bueno como para lo malo.
Si hay
felicidad y alegría, las gozaréis más, si hay dolor y pena, sufriréis más,
porque empezáis a vivir y a sentir como Yo, vuestro Dios, siento. Ya no
seréis vosotros los que caminaréis en el mundo, Seré Yo en vosotros, Mi
Sensibilidad Divina estará en vosotros.
Entended,
Mis pequeños, que el don de la vida que os he concedido, es algo
grande, algo importantísimo y no solamente para vosotros, sino para
infinidad de almas, a las que podéis salvar, a las que podéis hacer crecer
espiritualmente, a las que podéis ayudar sabiamente, porque Yo hablaré a
través de vosotros, Yo caminaré con vosotros, Yo Bendeciré a través de
vosotros. ¿No se os hace esto grande y bello, Mis pequeños, que Yo esté
plenamente en vosotros?
Empezad,
Mis pequeños y Yo os iré enseñando cómo crecer a estos niveles a los que os
estoy llevando.
Gracias, Mis pequeños.
Tercer
Misterio, Habla
Dios Padre.
Sobre: Yo preparo, guío y elevo a las almas que quieren estar Conmigo, si vosotros estáis haciendo un esfuerzo grande, a veces, de salir a flote de luchar contra la maldad que os rodea, ¿por qué no os voy Yo a consentir?
Hijitos
Míos, vosotros, los que estáis Conmigo, os podéis dar mejor cuenta de todo lo
que está sucediendo a vuestro alrededor, tanto en lo material como en lo
espiritual. Aquellas almas que están Conmigo, tienen dones superiores,
capacidades superiores a las que no están Conmigo. Les permito a éstas
almas, conocer mejor cómo os ataca satanás, hacia donde os va llevando y
muchas veces, en qué va a terminar ésa o ésas almas, al llevar la vida que
están llevando, cuando éstas almas están creyendo que están haciendo un bien
o que están ganando muchas cosas materiales, sin darse cuenta, que lo que
están ganándose es su perdición eterna.
Mis
pequeños, vosotros, los que estáis Conmigo, precisamente porque os doy
capacidades
superiores, vosotros tenéis la obligación de amor, de poder salvar a éstas almas, ayudarlas a que entiendan su situación espiritual, a motivarlas a un cambio de vida verdadero, ayudarlas a que se dejen mover por Mi Gracia y sobre todo, que vivan verdaderamente Mi Amor.
¡Cuánta equivocación y cuánta
maldad existe en tantas millones de almas alrededor del mundo! Si
no fuera por Mi Amor, por Mi Misericordia Infinita, ¡prácticamente todas las
almas se condenarían! Pero Yo no puedo dejar abandonadas, dejar a la
deriva, a aquellas almas que tratan de llegar a Mí.
DiscúlpenMe,
Mis pequeños, que os diga así, pero sois tan pequeños, sois tan mediocres,
pero, ciertamente, muchos de vosotros tratáis de estar Conmigo y,
ciertamente, lo hacéis, lo hacéis por pequeños momentos durante el día, en el
mejor de los casos. Pero, ¿qué pasa en los otros momentos? Muchas veces caéis
en pecado y a veces, hasta pecados graves. En un momento estabais
buscando cómo llegar a la santidad, platicabais Conmigo, Me poníais todo
vuestro corazón y toda vuestra alma a Mi disposición; minutos después, al
terminar ésa oración tan bella, salís al mundo, salís a vivir en sociedad y,
¿cómo actuáis?, caéis en faltas y a veces, hasta graves. Despreciáis
a vuestros hermanos, os sentís superiores porque habéis hecho una oración
anterior, que creíais que os sublimaba, pero la realidad está ahí, caéis y a
veces hasta más bajo que vuestros hermanos que no oran y, esto es más grave,
Mis pequeños, porque si vosotros decís que estáis Conmigo y caéis, es
porque, con toda intención, Me estáis haciendo a un lado, porque
vosotros sí Me conocéis y aquellos hermanos vuestros ni en cuenta Me toman.
¿Veis lo
difícil que es vivir en estado de Gracia todo el tiempo, Mis pequeños?
Especialmente porque os dejáis mover por vuestra voluntad, por vuestras
pasiones, por vuestros defectos, por vuestros vicios. No tratáis de vivir en
la Virtud, no tratáis de detener vuestra maldad, no dejáis que Yo penetre en
vosotros y os vaya purificando, os vaya limpiando, eliminando todo aquello
que no es bueno para vosotros pero, además, cuando os voy quitando lo malo,
lo voy reponiendo por cosas muy buenas, pero no me dejáis hacerlo, os seguís
prefiriendo a vosotros mismos, seguís prefiriendo vuestra historia, seguís
prefiriendo vuestra voluntad. No tenéis Fe, en una palabra.
Sí, Mis
pequeños, el no querer cambiar, el no querer que Yo tome Mi lugar soberano en
vosotros, es por una falta de Fe tremenda. Esto os lo digo, Mis pequeños,
porque decís que oráis, pero no os soltáis totalmente a Mi Voluntad y a lo
que os quiero pedir. Preferís manteneros en lo que ya conocéis, tocáis,
vivís, que es vuestra historia y no queréis romper ésos cartabones, ésa vida
que habéis llevado de maldad, de mediocridad. No os queréis superar,
dejándoMe a Mí Vivir plenamente en vosotros. No os dais cuenta que sois
creaturitas, sois pequeñitos, no valéis nada y, aún así, os amo y os amo
tanto, al grado de que cuando vosotros, en Fe, en plena confianza, Me dejáis
vivir y moveros a vosotros, que no sois nada, en ese momento, os doy regalos
inimaginables, que vosotros, como creaturitas mediocres, no podríais encontrar
en ningún lado, ni podríais, de ninguna forma, con vuestras capacidades,
lograr obtener estos regalos que os doy, porque os amo y porque Me dejáis
vivir plenamente en vosotros.
Quiero que
entendáis plenamente esto, Mis pequeños, que lo entendáis plenamente y lo
sabéis, pero no lo queréis poner en práctica, porque muchas veces os lo he
repetido, que sin Mí, no sois nada, así de simple, Mis pequeños, sin Mí, no
sois nada y no podéis crecer en capacidades altísimas si no estáis Conmigo.
Si no Me dejáis a Mí obrar en vosotros, no sois nada, entendedlo, no sois
nada, Yo Soy el Todo. Yo puedo hacer de una pequeña creaturita, grandes
personajes espirituales, que vuestros hermanos se asombran de ver éstas
capacidades nuevas en vosotros, pero las habéis ganado, porque Me dejasteis
obrar a Mí, vuestro Dios en vosotros.
Vosotros
mismos limitáis Mi obra en vosotros, como no tenéis capacidades grandes,
porque no queréis tener Sabiduría altísima, no os podéis imaginar lo que Yo,
todo un Dios Creador, os puedo dar. Vosotros no podéis imaginar grandes
cosas, porque no tenéis forma de imaginarlas. Vosotros podéis imaginar
ciertas cosas a través de lo que vivís a lo largo de vuestra vida. Como por
ejemplo, en la antigüedad, en la época de Mi Hijo, aquí en la Tierra, ¿podrían
imaginarse las almas de ése tiempo, el vivir lo que estáis viviendo ahora
vosotros?, tener ferrocarriles, coches, aviones, satélites, son cosas para
vosotros normales pero, para ésa gente, inimaginables, porque no tenían punto
de comparación con nada.
Y así, Yo
os puedo dar cosas que ahorita, ni siquiera os podéis imaginar que puedan
existir, pero están ya en Mi Pensamiento. Si vosotros Me tenéis confianza
plena, si vosotros Me dais el lugar que Me corresponde como Dios en vuestra
vida, Yo os puedo llevar a tener un conocimiento y una Sabiduría altísimas.
Con todo
esto, Mis pequeños, os quiero decir que os quiero llenar de regalos
bellísimos, altísimos, porque Soy vuestro Padre, Soy vuestro Creador y Yo
quiero la perfección en vosotros. Estáis en párvulos, Mis pequeños, os quiero
llevar a niveles muy altos y ésos son Mis regalos, Mis pequeños, voy
consintiendo a todas aquellas almas que se sueltan a Mí, ¿o acaso no lo
habéis vivido vosotros, los que estáis Conmigo, los que lucháis contra todo
aquello que está a vuestro alrededor que os quiere apartar de Mi
espiritualidad, que os quiere mantener en una mediocridad pecaminosa? ¿Acaso
no os dais cuenta ya de que sois diferentes en el pensar con la gran mayoría
de vuestros hermanos? Os he ido preparando, conocéis más cosas, intuís
muchas más cosas, conocéis ya más Mi manera de pensar y Mi Corazón, ¿Acaso no
os alegra esto? Os he dado estos regalos y muchos más, que si os
ponéis a meditar, os daréis cuenta de cómo os he consentido en estos últimos
años. Yo preparo, guío y elevo a las almas que quieren estar Conmigo, si
vosotros estáis haciendo un esfuerzo grande, a veces, de salir a flote de
luchar contra la maldad que os rodea, ¿por qué no os voy Yo a consentir? Es
Mi regalo hacia vosotros, las almas que quieren mejorarse, que quieren vivir
en Mi Voluntad, que Me quieren regalar su propio ser. Yo Soy un Padre
dadivoso, Justo e Infinitamente Bueno, Yo doy Infinitamente más, no lo que
vosotros Me dais. Si vosotros Me dais vuestro pequeño ser, Yo Me doy en totalidad
por vosotros. ¿Acaso esto no es una gran ganancia para todos vosotros, los
que Me estáis buscando?
Gracias, Mis pequeños.
Cuarto
Misterio, Habla La Santísima Virgen María.
Sobre: ¡No!, Mis pequeños, no os engañéis, estáis viviendo ya el mundo a donde satanás os ha querido llevar, él, prácticamente se ha entronizado. Hijitos Míos, Soy vuestra Madre, la siempre Virgen María. Mis pequeños, en graves peligros estáis. Como os dijo el Padre, Nuestro Dios, el Amor Infinito, sois pequeños y algunos, mucho más pequeños que otros, porque no buscan la Sabiduría Divina, porque no buscan servir a Nuestro Dios.
Satanás es
muy hábil, Mis pequeños, satanás tiene una inteligencia muy superior a la
vuestra, conoce vuestras debilidades, conoce vuestros deseos. Ciertamente, no
conoce plenamente vuestro interior, vuestros pensamientos y vuestro corazón,
pero os conoce por vuestros actos, por vuestra forma de ser, por vuestra
forma de responder.
Satanás
está manipulando los gobiernos de la Tierra, está manipulando la economía
para desestabilizar a la sociedad pero, sobre todo, a vuestro interior,
porque él sabe que vosotros, al no tener de lo material, os preocupáis
demasiado, porque no confiáis en la Providencia Divina de Nuestro Dios. Os
está llevando a situaciones difíciles a nivel mundial, guerras, hambre,
destrucción, muerte, injusticias, maldad, estáis viendo cómo ya se ha
entronizado alrededor del Mundo, ya no se habla prácticamente de ningún país
en el cual se esté viviendo en paz, en armonía, que no tengan problemas, todos
estáis sufriendo ahora.
Ciertamente,
Nuestro Padre Dios, en Su Sabiduría Divina, lo permite para
acrisolaros, para que de aquí surjan las almas santas, las verdaderas almas
que busquen la espiritualidad antes que lo material o lo humano.
Vosotros no fuisteis creados para vivir eternamente una vida humana y
material, vosotros fuisteis creados para servir a Nuestro Dios en lo
espiritual que, ciertamente, utilizando lo material, dierais Gloria a Él,
llevando lo material a lo espiritual y, esto es, la vida humana hacia
la espiritualidad que todos debéis vivir, porque estáis todos llamados a
regresar al Reino de los Cielos, que es una vida espiritual total.
Ciertamente
satanás os quiere llevar a la desesperación, para que cometáis graves
errores, que os vayan hundiendo cada vez más en el pecado, que os vayan
deshumanizando, que os vayan apartando de lo que debéis vivir, que es ésa
vida espiritual, que os enseñó Mi Hijo Jesucristo. Pero lo peor de todo
a esto que está pasando, Mis pequeños, es que no os estáis preparando
espiritualmente. Os desesperáis, pero no acudís a Nuestro Dios, buscáis por
muchos medios, pero no regresáis a Nuestro Dios, no confiáis en Él,
es más, hasta lo blasfemáis y os apartáis de Él. Preferís robar, preferís
matar, preferís muchos otros medios en los cuales os aprovecháis de vuestros
hermanos y les quitáis sus bienes, con tal de no sufrir vosotros mismos, pero
sí dejáis sufrimiento a vuestros hermanos y así se ven, robos, asaltos,
afectaciones a vuestros hermanos, secuestros, muertes, cambiáis una vida por
unos cuantos pesos.
Estáis
viviendo un horror, Mis pequeños, y esto solamente os va a llevar a una
muerte espiritual, en la cual, vosotros mismos no os estáis preparando ni
estáis viendo sus consecuencias.
Ya os dije
que esto es una preparación, un acrisolamiento para entresacar de la
humanidad, en la que estáis viviendo, a las almas que merezcan mantenerse
para el Nuevo Mundo que se le dará a las almas que, dando su vida,
podrán regresar al Reino de los Cielos, al darse por las que no merecen esa
vida espiritual. Tanto se os ha dicho que debéis ser otros Cristos,
que os debéis dar por vuestros hermanos, lo estáis viendo ya ahora, ésta es
vuestra oportunidad de ser otros Cristos, os debéis dar para vida de vuestros
hermanos, debéis luchar contra lo engaños de satanás. Lo estáis viendo, lo
estáis viviendo, estáis sintiendo su maldad a vuestro alrededor, ¿qué más
esperáis, Mis pequeños, para protegeros contra sus ataques?
Ciertamente,
si no os preparáis, os va a ganar, os va a vencer y os va a destruir
eternamente, es una realidad, Mis pequeños, lo estáis viviendo alrededor del
mundo. Vosotros mismos lo veis todos los días cuando habláis con vuestros
hermanos, ¿os hablan de un bien que estén ellos viviendo? ¡No!, Mis pequeños,
no os engañéis, estáis viviendo ya el mundo a donde satanás os ha
querido llevar, él, prácticamente se ha entronizado, ¿dejaréis que lo
haga plenamente o lucharéis todavía por tratar de quitarle poder, produciendo
amor, el Amor que os enseñó Mi Hijo Jesucristo?
Ciertamente
sois pequeños, pero no vais a luchar solos, está Mi Hijo con vosotros, estoy
Yo, vuestra Madre, que es Mi Tiempo para ayudaros. Juntos podremos vencer,
apoyaos en los Poderes del Cielo, en la Vida espiritual Divina de Nuestro
Dios y veréis que satanás será vencido, él lo sabe, está vencido, pero
vosotros debéis actuar para verlo ya bajo Mis Pies.
Gracias, Mis pequeños.
Quinto
Misterio, Habla
La Santísima Virgen María.
Sobre: Todo lo que Dios, Nuestro Padre ha creado, es bello, satanás nunca podrá presentarse como un ser bello, lo que vosotros veréis salir de ésas luces que bajarán, no son seres bellos, además de ser engañosos, malos. (Lenguas…) Hijitos Míos, satanás, vuestro enemigo, se ha confabulado con los poderes religiosos y políticos de la Tierra para engañaros, para engañar a la humanidad entera. Estáis viendo ya sus luces en los cielos, se está haciendo cada vez más presente entre los hombres, se presenta con luz para engañaros. Os va preparando para que os vayáis acostumbrando a su presencia. Veis luces, y ya os había prevenido, Mis pequeños, en Mis apariciones, que vierais a los cielos, éstas son las señales que estáis viendo ya y que está preparando satanás para bajar nuevamente y convivir entre los hombres, como ya antiguamente lo ha hecho.
Cada vez
que ha bajado y convive entre los hombres, graves situaciones ocurren. El hombre se deja engañar
fácilmente por su poderío, por su inteligencia, por sus capacidades muy
superiores a las vuestras. El hombre se rinde ante él, se ofrece ante él, le da
sacrificios, sangre, vidas humanas.
Estáis a
momentos, Mis pequeños, de entrar en esa etapa que ya la humanidad ha vivido
antes.
Las luces
que veis en los cielos, bajarán. Ciertamente habrá temor al principio, pero
os ganarán con su tecnología, muy superior a lo que vosotros conocéis. Os he
dicho que satanás os conoce, conoce vuestros gustos, vuestros deseos y así el
hombre cae y se rinde a sus pies.
Es la
bestia, es la maldad a la que adoraréis, los que estéis con él y los que no
queráis estar con él, perseguidos seréis.
Ciertamente,
habrá protección del Cielo para todos vosotros, los que estáis luchando por
la Verdad, por una vida Divina entre vosotros y os lo digo así, Mis pequeños,
porque los que estáis con Nuestro Dios, estáis ya pidiendo, desde lo más
profundo de vuestro corazón, el Reinado de Mi Hijo sobre la Tierra y en todo
el Universo.
Soy
vuestra Madre, Mis pequeños y os cuido, os prevengo, os guío; lo que menos
quiero, es que satanás os destruya.
Mi Hijo Me
pidió protegeros y así lo hago, os quiero dar Su Luz, la Luz Verdadera, que
da Vida y no la luz de engaño que os trae satanás. Todo lo que Dios, Nuestro
Padre ha creado, es bello, satanás nunca podrá presentarse como un ser bello,
lo que vosotros veréis salir de ésas luces que bajarán, no son seres bellos,
además de ser engañosos, malos. Si no tratáis de buscar una vida interior
para que seáis protegidos por la Sabiduría Divina, satanás, con su astucia,
con su inteligencia muy superior a la vuestra, os engañará fácilmente y os
llevará a un caos Universal.
Dios es
Uno y nadie puede tomar Su Lugar, satanás siempre ha querido ser superior a
Nuestro Dios, pidiendo que se le adore, que se le dé el lugar que no merece.
Todo aquél que quiera tomar el lugar de Nuestro Padre y Nuestro Dios, no
viene de Dios.
Os sigo
cuidando, Mis pequeños, os sigo advirtiendo, sobre lo que estáis viendo y que
pronto viviréis.
Tenéis el
arma más poderosa que os anuncié en todas Mis Apariciones, que es el rezo del
Santo Rosario, con él podréis vencer a satanás. Es sencilla ésta arma,
pequeña, pero muy poderosa. Así es Nuestro Dios y así os lo mostró Mi Hijo
Jesucristo al venir a la Tierra, con lo pequeño, podéis vencer a lo grande y
malvado.
Humildad,
Mis pequeños, Humildad necesitaréis en estos momentos, sencillez. No busquéis
lo que no estáis preparados a vivir, que son, grandes lujos, poderes,
capacidades muy superiores a lo que vosotros podéis manejar. Sed sencillos y
humildes y Nuestro Padre Dios, en su Santísima Trinidad, os premiará. Acudid
a Mí, protegeos en Mí, vuestra Madre y Yo os ayudaré a pasar ésta gran
prueba, éste trago amargo, esta purificación que os va a llevar a la
Santificación del Nuevo Pueblo que ha de vivir para alabar a Nuestro Dios.
Gracias, Mis pequeños. |
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