MENSAJE DE LA SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA
A SU HIJA AMADA LUZ DE MARÍA 10 DE MAYO DE 2011

 

Amadísimos hijos de Mi Corazón Inmaculado:

MI BENDICIÓN PERMANECE EN USTEDES.

COMO MADRE, REÚNO A LOS MÍOS EN TORNO A MI HIJO.

LES CONDUZCO PARA QUE NO SE EXTRAVÍEN.

 

Son el regalo de Mi Hijo al pie de la Cruz, y en esa Cruz es donde permanece contenido el Amor infinito de Dios Padre para la humanidad.

 

Hijos, la percepción que mantienen del mundo no es la correcta, es engañosa. Por esto es urgente que se adentren en las Escrituras y vivan paso a paso el misterio del Amor de Dios por Su Pueblo. Pueblo que no respondió, como en este instante no responde la humanidad.

La Creación es unidad, unidad del Amor de Dios para Sus criaturas.

Hijitos, el desamor se ha infiltrado en el corazón humano y ha tomado todos los sentidos. La lucha del poder por el poder ha desvirtuado al hombre.

La humanidad se ha lanzado contra sí misma y contra todo lo creado, que ha sido devastado y transformado sin piedad alguna.

En este instante el Cosmos se conmociona ante el dolor que llega a la humanidad.

HIJOS, REENCUÉNTRENSE EN EL VERDADERO CAMINO.

CONVIÉRTANSE ANTES DE QUE EL LAMENTO LLEGUE.

 

Amados, oren, intercedan unos por otros.

 

Oren por Japón, es urgente.

Oren por Brasil, el dolor les azota.

Oren por Medio Oriente, oren.

Oren por Roma, el dolor pasará.

Oren solicitando luz para todos los gobernantes de los países.

La tierra se agrieta.

NO TEMAN, AQUÍ ESTOY PARA REUNIR AL REBAÑO DE MI HIJO.

En Mi Corazón voy reuniendo aceleradamente a Mis hijos, de un lugar y de otro. Convoco a los Míos en la unidad del Amor de Mi Hijo.

Protéjanse con fidelidad y amor fraterno.

ÚNANSE, NO SE LASTIMEN UNOS A OTROS.

ÚNANSE PARA QUE LA IGLESIA DE MI HIJO NO SE DEBILITE MÁS.

 

Les llamo a ustedes, Apóstoles de los últimos tiempos. Apóstoles que se han forjado en el crisol, les convoco a mantener la unidad.

 

HIJOS MÍOS, NO DESATIENDAN MIS LLAMADOS, LES AMO Y LES INVITO A LA CONVERSIÓN.

No descuiden el alma, velen por la salvación del alma.

Les bendigo.

Les amo.

Mamá María.

 

AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA.

AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA.

AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA.

 

 

COMENTARIO DEL INSTRUMENTO SOBRE EL MENSAJE

 

Hermanos (as):

¡QUÉ ALIENTO MATERNO!

¡QUÉ SUPREMA BENDICIÓN!

 

Un llamado angustioso de una Madre que no desea que los Suyos sufran.

 

Un llamado apremiante de una Madre que alerta, convoca y a la vez alienta a Sus hijos para que transformen un mundo desunido, en la UNIDAD DEL AMOR TRINITARIO.

Una Madre, que me mostró Sus Ojos empañados de lágrimas al pronunciar cada palabra de esta convocatoria. Miré Su Corazón latir al ritmo Divino, y dentro miré infinidad de almas que moran en el Corazón de la Madre que extendían sus manos hacia la humanidad.  Mientras Ella en su faz me reflejaba una súplica dirigida a todos; no a unos, sino a toda la humanidad.

LO QUE DIOS HA ESPERADO DE LAS GENERACIONES ANTERIORES, LO PIDE EN ESTE INSTANTE A CADA UNO DE NOSOTROS, A ESTA GENERACIÓN, NO A OTRA.

UNIDAD. Unidad a la que debemos salir al encuentro y no esperar pasivamente, sino dar cada uno el primer paso.

No separemos el Cuerpo Místico. El Cuerpo Místico somos todos los hombres y mujeres.

Unámonos, recordando que la unidad enlaza, compromete, da fuerza, hermana y humaniza.

HERMANOS, RESPONDAMOS A MAMÁ MARÍA, ¡YA!

Amén.